Arenales en San Sebastián

Cocina y servicio 10/10! Si pasas por la ciudad no puede faltar la parada! (Cocina deliciosa, vinos naturales y muy buen ambiente) Nos vamos muy contentos!

Probamos cada uno de sus platillos, bien preparados, deliciosas mezclas de sabores y los vinos sugeridos un verdadero lujo. Relación precio calidad excelente.Sin duda volvería y recomendaría.

Todo un descubrimiento. Es un sitio pequeño y en firma de tubo. Parece que te transportas a Malasaña por el tipo de local.La carta es muy corta, 8 o 9 cosas pero espectacular. Probamos 5 platos y postre y todo genial, destacando las alcachofas y el broche de morcilla y lo que menos el ravioli de langostinosVolveremos

Cómo su nombre indica, este establecimiento es un bar, fuimos sobre las 4 de la tarde pedimos unos cafés y la dependienta nos dijo que no servían café, al preguntarla como que no servían si tenían cafetera y estaba encendida, la respuesta fue: El café solo lo servimos para lis clientes que comen o cenan, así que nos tuvimos que marchar, es la primera vez que esto nos ocurre, no volveremos a entrar por desagradables y falta de atención al cliente.Señores, un bar es un bar y mientras esté abierto hay que servir lo que el cliente solicite, siempre que haya disponibilidad y más si el cliente lo pide con educación.

Aunque estaba un poco caro para sus raciones la comida esta bien. Pero es muy raro que una restaurante en euskal herria no tiene sidra.

Un espacio acogedor con muy buena música, servicio impecable y platos especiales y de calidad.Pedimos diferentes platos para compartir y fue una buena idea.- Ceviche de muxarra- Alcachofas con yema y papada con ibérica- Zanahorias con queso crema, almendras y vinagreta de anchoas- Entrecula con puré de apionabo y chimichurriTodo estaba delicioso, a recalcar la calidad suprema de la carne y las alcachofas.De postre pedimos:- Lemon pie- Panqueque de dulce de leche con fresas y yogur- Manzana asada con mascarpone y nueces garrapiñadasTodos estaban muy ricos pero sobretodo la manzana y el lemon pie. Los cafés muy buenos también.Disponen de una carta muy variada de vinos orgánicos, pedimos un chardonnay seco y la chica acertó perfectamente con lo que queríamos.Recomendamos 100% ya que nos quedamos con ganas de probar más, así que volveremos! Uno de nuestros favoritos de la ciudad.

Fuimos mi pareja y yo a cenar ya que nos llamó la atención las reseñas que tenía y la verdad que de la comida no tengo queja alguna, pedimos Ceviche y lengua, ambas cosas buenísimas.Lo que no me parece normal es que siendo un sitio en el que te gastas 16€ en un plato que menos que ir a un baño limpio.Cuando quise entrar al baño de mujeres estaba fuera de servicio, así que obviamente me tocó ir al de hombres, el cual estaba con el suelo lleno de agua o eso quiero pensar y no hablemos de cómo estaba la taza...una vergüenza la verdad...

Atencion de 10 por parte de la camarera que fue muy amable y simpática. La comida de 10. Los raviolis de calabaza brutales!!!

Me saco el sombrero!!! Carta pequeña con 8 platos y 3 postres. Y se entiende porque todo lo hacen en una pequeña cocina de 1 m2!!! Se nota el esfuerzo y las ganas!!! La carta de vinos naturales es espectacular. En hora buena!!!